viernes, 12 de octubre de 2012


          MALDICIONES

Maldita sea la Dama de los Duelos
que esparce la miseria en los caminos
y tiende un manto gris sobre los pueblos.

Vértigo de los vientres deshojados
dispérsate en el viento como niebla,
termina ya tu guerra en los sembrados.

Maldita tu pasión por la tiniebla.
Negrura de los ojos de los niños
hundidos en la faz que un cráneo puebla.

Teta reseca de los pliegues fríos,
huérfana de la leche consumida
niega a las moscas tu pezón baldío.

Maldita sea la mano que te empuja,
que busca de los hombres fe sumisa,
que hiere el corazón como una aguja.

Descálzate la bota que nos pisa
la honradez, la fuerza y la mesura
con un chantaje que de muerte avisa.


Maldita tu afición por la tortura,
maldita delgadez de beber sangre,
maldito tu dominio mientras dura.


Maldita sea tu fauce cuando se abre,
maldito mi dolor que al mal acerca,
maldita seas tú, La Puta Hambre.